viernes, 20 de septiembre de 2013

¡A saber, a saber!
A saber qué de cosas te han contado
¡todo mentiras!
Pero a saber cuánto te has creído.
A saber por qué prefieres escuchar 
todo lo que te cuentan
sin ni siquiera conocerme. 
A saber por qué te es fácil hablar mal
y a saber cuánto mal se podría decir de ti...


mearrepientodetantoahora

martes, 17 de septiembre de 2013

a la locura

una hoja en blanco y un año por empezar
para encontrar el sentido a lo que es el alma
lo que es el tiempo y a cuánta velocidad se nos escapa
hay que ver, nunca más habrá un diecisiete de septiembre
de dos mil trece
qué lástima qué pena por lo que los tontos se alegran
con palabras se piensa con palabras se expresa
con palabras se hace la propia realidad
Y SI NO QUÉ
cuántos milenios siglos décadas
años pero y si hablamos de generaciones qué
qué de románticos hay ahora y con cuánta intensidad
con cuánto amor vivimos y cuánta pasión lo hacemos todo
todo que ya estaba hecho antes
pero ahí vamos nosotros a hacerlo mejor
o a intentarlo
y si no qué


jueves, 12 de septiembre de 2013

Las historias realmente bonitas te acompañan (siempre)

Ojalá uno pudiese vestirse de libros. De todos los libros que hubiese leído a lo largo de mi vida o a base, simplemente, de aquellos que de verdad te gustaron. Esos libros que leerías una y otra vez aún ya sabiendo el final. Espero que todo el mundo tenga un libro como ese. También se podría vestir de los libros que sean sencillos cuentos, o novelas que desde fuera parecen eternas. 
De libros de aventura se vestiría el más valiente. Libros con muchos viajes, muchos lugares, peligros, amores pasajeros, amores sinceros o, no sé, sólo aventuras de una noche. Aventuras para los más atrevidos. Para los que viven para descubrir, para los que se saben dejar llevar por la corriente...
¡Libros de acción! De enormes aviones, camiones, coches veloces y helicópteros salvavidas se vestirían las personas más intensas, a las que saben disfrutar de un nudo en el estómago, de la incertidumbre de cómo acabará. De explosiones, fuego, armas blancas, grandes saltos, tiroteos y sangre se vestirían los que amasen proteger con la vida a quien aman.
No quiere decir que a los que le guste la historia vivan en el pasado y, por defecto, no vivan el presente. Pero los libros que cuentan qué pasó años, décadas, siglos atrás, serían perfectos para aquellos que supiesen valorar el esfuerzo de sus antepasados y que sepan ver los errores que se cometieron para utilizarlos como ventaja en la actualidad, qué bien falta haría...
De los libros que cuentan una historia de amor me vestiría yo. De mil historias y todas ellas serían diferentes. Pueden pasar tantas cosas en el amor que casi asusta pensarlo. Pero quién sabe, puede empezar la historia en cualquier sitio y acabarla en el mismo o mil kilómetros más allá. Puede empezar un amor verdadero, puro y sincero y acabar entre mentiras, rasguños, moratones y lágrimas. Podría empezar la historia de un amor eterno con un encuentro, una pelea, una fuerte discusión o incluso un "te odio". Porque ya se sabe lo que se dice, del amor al odio... Y viceversa. 

Hay tantas formas de amar: a base de engaños, por obligación, por presión, porque es fácil conformarse, por sumisión, por miedo... Miedo a no ser nunca más amado. Miedo a perderlo todo si no amas. Miedo a temer a la muerte si amas. O, quizás, incluso, por amor, porque sí.
Hay tanto que amar: defectos, cicatrices, álbumes, tristeza, alegría, pasados, futuros, gestos, expresiones, ideas, ideales, principios, recuerdos. 

Yo estoy tranquila. Sé que no voy a morir desnuda.