Hoy te pienso,
he sacado tiempo
de los herméticos relojes de arena
para pensarte y
así tenerte presente.
Porque presiento que te vas,
que te vas a alejar sin
que nada ni nadie lo pueda evitar.
Te mereces mucho más
que todo el tiempo que yo te pueda dar.
Tu vida no ha sido lo que has merecido al final.
Si la gente supiese que aún todavía existe gente tan buena...
Vuelves a hacerme creer en la vida, abuela.
No hay comentarios:
Publicar un comentario